V EMF Valencia 2006

Voy a dejar a un lado momentáneamente teleco, que no sólo de estudiar vive el hombre y voy a tocar un tema que da más juego. En primer lugar, quiero decir que el siguiente post no se debe tomar como una réplica a ningún otro en particular, sino que viene motivado por todos los comentarios que últimamente, y desde hace ya un tiempo surgen sobre el tema. Y para que mi opinión quede expuesta aunque no la vaya a leer casi nadie. Confío además en que así, por lo menos los no-telecos que me lean puedan leer algo aquí que sepan de lo que va.

Pues como el título indica, voy a hablar del Encuentro Mundial de las Familias que se desarrollará en nuestra ciudad en menos de un mes. Un encuentro así se puede ver desde dos puntos de vista fundamentalmente, desde la fe o sin ella.

Viéndolo desde la fe, será un acontecimiento maravilloso, que mostrará la unidad y universalidad de la Iglesia, y que va en apoyo a una institución tan importante como es la Familia. Un encuentro con Cristo capaz de cambiar los corazones y por el que mucha gente hará largos viajes y esfuerzos físicos y económicos impresionantes. Aquellos que sienten que Dios los llama a encontrarse con Él en Valencia y por lo que dejarán muchas cosas por tal de seguirle.

Si quitas la fe, tendrá lugar un macroevento que reunirá a mucha gente, que va a costar mucho dinero y que causa y va a causar muchas molestias. Son las voces que sólo ven el encuentro desde esta óptica, las que últimamente no hacen más que llamar al Papa de todo menos bonito, y se quejan de que parte de este acontecimiento sea financiado con dinero público. A continuación, analizaré algunas de las quejas más frecuentes y comentaré ciertos aspectos sobre ellas.

Una de las cosas por las que la gente protesta es por el colapso que presumiblemente sufrirá Valencia y por el cual los servicios de la ciudad no funcionarán con normalidad e incluso algunos exámenes cambian de fechas. Pues bien, esas cosas no pasan porque venga el Papa (no, no estoy loco), esas cosas pasan porque a Valencia van a venir entre un millón y millón y medio de personas. Pero claro, se podría decir que no vendría tanta gente si no viniese el Papa, y que por lo tanto la culpa es suya y es legítimo cagarse en él y todo eso, pero es que el Papa tampoco ha elegido el lugar donde se va a realizar el encuentro, ni lo ha elegido el Arzobispado de Valencia, el lugar lo han elegido las autoridades civiles, así que si alguien tiene alguna queja de que corten calles, o ese día no puedan ir a trabajaro o lo que carajo no puedan hacer, que se lo comente a doña Rita (creo que es cosa suya, sino pues lo habrá elegido Camps, o si no entre los dos) que ha elegido ese sitio para que el Papa le haga publicidad turística de Valencia, ya que todo el mundo, los que estén presentes y los que lo sigan por televisión, se podrá hartar de ver la Ciudad de las Artes y las Ciencias (entre otras cosas).

Otra cosa que suele causar numerosas propuestas es el elevado gasto que el evento conlleva. Y que no están de acuerdo que con su dinero, con el de todos, se subvencione parte de algo con lo que no están de acuerdo, y que no hay derecho que en una sociedad aconfesional pasen estas cosas, etc, etc, etc. Pues bien, ¿alguien ha pensado los beneficios económicos que este acto puede representar para Valencia? Vale que se está gastando mucho dinero, pero un millón y medio de personas, a poco dinero por día que se dejen, van a acabar dejándose un pastón. Todos los lugares dónde se puede pernoctar (hoteles, alberguesres...) están reservados desde hace un montón de tiempo y con precios que no son precisamente baratos. Y lo que van a ganar los comerciantes que se encontrarán de repente con un montón de gente más a las que vender sus productos, gente que además estará buscando comprar cosas de recuerdo y que lo harán aunque les pongan unos precios abusivos. Y a nivel de cualquier ciudadano, es muy fácil hacer un buen negocio. Hasta un millón de pesetas se paga por un balcón para un día. Hospedando a los peregrinos puedes hacer un gran negocio y en cuatro o cinco días como mucho ganarte un pastón si te lo propones. Y las posibilidades de buscar negocios de dos días con la cantidad de gente buscando cosas que va a haber son tantas como tu imaginación pueda alcanzar. Al que no le guste el encuentro por lo que es, puede sacar tajada. Además de la campaña de Turismo extraordinaria que eso va a representar, y que mucha gente, ya puestos que vienen estos días se quedarán a pasar unos días de vacaciones en Valencia una vez pasado todo el follón. Además esa gente que reclama que no se aporte un duro de dinero público para este evento, no ponen el grito en el cielo ni mucho menos cuando los gobiernos lo que hacen es financiar con dinero público obras de teatro que ofenden a los católicos (y otras confesiones) como la de "Me cago en Dios"; o se subvenciona la cabalgata del día del orgullo gay, consistente básicamente en que un grupo de gente desfila con un vestuario que se puede clasificar en dos tipos: Tipo bolingas y tipo cura/monja pero siempre con carteles y actitudes insultando a la Iglesia; o se subvencionan festivales pornográficos, bajo la excusa de que es un proyecto de investigación serio.

Sobre los aspectos positivos del encuentro, a parte de que pueda resultar beneficioso económicamente para Valencia, los más importantes son los que tienen que ver con la fe. Y esas cosas no me gusta tratarlas en posts porque me parece un medio muy "frío" y "lejano" como para poder expresarme como me gustaría. Así que sobre eso no voy a añadir mucha cosa más, solo diré que yo ya tengo mi acreditación para el encuentro como voluntario, porque yo sí que espero este encuentro y sentía que debía participar en él como voluntario, ya que la labor de éstos es imprescindible para el buen desarrollo de estos eventos y siendo de Valencia mi "obligación" era estar al servicio de los que vendrán desde todos los lugares del mundo y colaborar en que este encuentro para que se pueda desarrollar lo mejor posible y pueda ser realmente un encuentro con Cristo para todos ellos.

Bueno, supongo que casi nadie estará de acuerdo conmigo, así que si alguien quiere poner algún comentario que no se sienta cohibido pensando que igual no me gusta. Y para acabar, no lo puedo remediar:

BENEDICTO XVI, TE ESPERAMOS

Un saludo.